Es un bar de tapas, espacio pintado de color rojo, con ladrillos a la vista y clima cálido. Es el bar de un argentino que pasó 5 años en España donde se hizo adicto a las tapas. Tanto le gustaba “tapear” que cuando llegó a Buenos Aires, convenció a sus padres de poner este restaurante. Después de conocer esta historia, queriamos saber mas sobre las famosas tapas. Investigando, supimos que en la época de Carlos tercero, se tomaba mucho vino (no queremos mentir… siempre se toma mucho vino!). Entonces, el rey, para evitar los conflictos estomacales que se adquirían por el grado de alcoholización alcanzada, mandó colocar un plato con jamón y queso a modo de “tapa”. De esta manera, evitaba que se tomara vino con el estómago vacío. Satisfecha nuestra curiosidad, continuamos con el restaurante. Usted se preguntará ¿Se sirven tapas como en España? No, la tapa está adaptada al paladar argentino. Por ejemplo, se come sentado, pero tratando de rescatar la idea de encuentro con amigos. Por supuesto, evitando emborracharse. Aunque tenemos otra opción: tapear y emborracharse también. ¿Por qué no?